Pedro es un nombre propio masculino de origen griego. Deriva del término "Πέτρος" (Petros), que significa "piedra" o "roca". Este nombre hace referencia al apóstol San Pedro, uno de los discípulos más cercanos a Jesús en el Nuevo Testamento. Se cree que el nombre Pedro fue otorgado por el propio Jesús al apóstol, quien originalmente se llamaba Simón, debido a su sólida fe y compromiso con la difusión del cristianismo.